La zona conocida como Los Roques de
García, ubicada a las faldas del Teide, en la isla de Tenerife, está
constituida básicamente por una serie de bloques dislocados,
producto del colapso y/o explosión de la caldera del volcán precursor
del actual Teide. A través de algunos senderos se pueden explorar
estas formaciones rocosas.
Entre las muchas características
geológicas que se pueden admirar en esta zona destaca la presencia
de una colada de lava con textura Pahoehoe, la cual discurre por la
ladera baja del Teide y temina en la llanura de la actual caldera.
Sobre la superficie de esta roca se
observa la frecuente presencia de cristales tabulares de hasta 3 cm
de diámetro, blanquecinos a transparentes, y que bajo el microscopio
petrográfico se han podido identificar como Labradorita. En cortes
frescos, la roca muestra un color negro opaco. A pesar de estar
compuesta mayoritariamente por vidrio volcánico, su lustre mate y
ausencia de ese brillo tan característico de la obsidiana, hace
pensar que, visualmente al menos, se corresponda con un Pitchstone, término
ingles para el cual no he encontrado una traducción aceptable. En base a su composición química, la roca ha sido clasificada por otros como un Traquibasalto .
"Cascada" de lavas tipo Pahoehoe
Matriz de la roca compuesta mayoritariamente por vidrio volcánico.
Luz plana polarizada.
Cristales de Labradorita (An57) mostrando textura Glomeroporfirítica.
Polarizadores cruzados.